Las valoraciones de los
imperios comerciales, suelen partir, de la valoración de la empresa
en La Bolsa. Esto es falaz, equivale a plantearse que si yo compro un
pollo por tres euros Kg. Para hallar el valor de todos los pollos del
mercado bastaría conocer el peso y multiplicarlo por tres euros.
No quiero decir con esto
que la labor del señor “Montaña de Azúcar” (traducción
literal de Zuckerberg) no haya sido meritoria. Pero después de
muchos años de moverme por el mundo financiero e industrial, he
llegado a la conclusión que lo humanamente correcto es medir las
empresas por el provecho marginal que reportan.
Para ello cabe
preguntarse:
Cuantas personas se ganan
la vida con esa empresa ¿Cuantos hogares tienen su seguridad en
ellas?
¿Que daños y que
beneficios produce a la sociedad y al medio ambiente?
Por ultimo; si mañana
por un azar de la historia, tuviésemos que prescindir de FB. Cuales
serían las pérdidas irremediables...
En fin, vistas las cosas
con una medida humana, en medida del hombre y su bienestar como ser
social, los valores de las cosas cambian. ¡Cambian y mucho!
La obra de un cojo,
calvo, alfeñique, o pringao. La obra de una tímida como tu dices,
tiene mas valor por lo que representa de crecimiento personal que por
el valor los ejemplares de sus libros que pueda vender. Gracias
Carmen por compartir tu humanidad con nostros.
Darío
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