Daba esta mañana con dolor la
noticia de la muerte de Hildegardo.
Sean estos versos tal vez
apresurados homenaje final a hombre tan
preclaro.
Murió el poeta y sus ideas
quedaran inmarcesibles
en la historia, como gestas.
Él hoy nos deja
como muro enjalbegado
con su lengua expresiones
de prístina belleza.
Mañana velarán en caja alta
sus despojos los de La Academia.
Murió la voz que encendió
horizontes prendió revoluciones
cantó huelgas.
Murió el poeta, su
palabra
será llevada por el viento
a otras gargantas.
y con ella los aires de revuelta.
Poeta zurdo conversador mediocre
y prosa analfabeta, hiciste mutis
por el foro y el foro
hará mutis
en tus exequias
© Darío